tag:blogger.com,1999:blog-48115486376501664632024-03-13T04:36:27.570+01:00cuanto cuento, castelocuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.comBlogger62125tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-70030713582628150582022-04-12T14:14:00.007+02:002023-11-08T14:26:14.884+01:00Bella nostalgia<p> Tonecho (mustio)</p><p><br /></p><p></p><p class="MsoNormal"> Camino por estas calles estrechas, de otro tiempo. Las he soñado
esta noche, por eso he venido. Me cruzo por el camino con gente que no conozco,
ni reconozco. Hoy día todo el mundo es insípidamente guapo, que aburrido. Ya no
veo narices torcidas, ni hombres debiluchos, ni mujeres pequeñas con cara de
audaces. Solo veo tipos musculados y chicas talla treinta y seis. Es todo tan
perfecto que da asco. Hasta los viejos salen a correr. Se ve que los feos son
minoría residual, en fin, ellos se lo pierden. Llego por fin al bar de mi sueño
(no de mis sueños). Ahora lo llevan un par de chinos. La mesa donde la vi por
primera vez sigue en el mismo sitio. Allí estaba ella, comiendo un plato de
espaguetis con tomate. Luego me dijo que tenía que comer entre copa y copa
(mejor no entro en detalles) Me atrajo al instante. Tenía facciones masculinas,
pero una boca que prometía susurros (y más cosas) y <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>los hombros más eróticos que he visto jamás.
La miré, deseando que me devolviese el interés. Cuando lo hizo, se echo a reír,
pues tres o cuatro espaguetis le colgaban de la comisura de los labios. Al
reírse, más espaguetis salieron, pero por la nariz, entonces yo también me reí.
Nadie lo vio, solo los dos, que fuimos cómplices en silencio de la escena.
Cuando se marchaba, la invite a tomar una copa justo enfrente. Ella aceptó, y
la charla fue amena (soy buen conversador, cuando “me pongo”)</p>
<p class="MsoNormal">A la media hora le propuse ir al bar de un amigo (mentira)
que quedaba cerca (mentira también), y nos fuimos. Llegados a un punto le
confesé que mi único amigo vivo era yo y que no tenía ningún bar, pero que mi
casa estaba igual de sucia y había tanto alcohol como si lo fuese, y que,
curiosamente, estábamos parados enfrente del portal.</p>
<p class="MsoNormal">Ya arriba le presenté a mis dos colegas yanquis más fieles y
cercanos, (Jack Daniels y Tom Waitts) y la noche y la música (y las drogas) nos
ayudaron a conocernos mejor, no mucho, si no lo justo para echar un polvo con el
suficiente morbo del misterio. Yo era joven, y ella más, a la edad en la que el
sexo se hace bien y se disfruta mal. Eso fue todo. Nos vimos durante dos semanas
más, y lo dejamos poco antes de que los ojos nos dejasen de brillar al vernos. Hicimos
bien, pues hoy disfruto al recordarlo y lo he revivido en sueños. Debe ser que
añoro aquellos tiempos. Añoro a mis amigas y esos amores que negué. Añoro lo
que nunca fue pero creí y sentí como si fuese. Estoy en el otoño de mi vida y
tengo frío. Te extraño.</p><br /><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com48tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-14467340128175828092022-04-05T14:17:00.009+02:002022-04-08T14:22:20.802+02:00Soledad<p> </p><p>(Tonecho)</p><p><br /></p><p></p><p class="MsoNormal">Soledad</p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p></p>
<p class="MsoNormal"> "Contradictorio, pero cierto, por eso jode. Cuando más solo
me siento es cuando estoy acompañado, amiga mía.</p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p>Dicen de mí que soy un lobo (...o un perro, depende de la
simpatía que me tengan) solitario ¡La hostia! qué capacidad de observación ¿Por
qué estoy siempre sólo? me preguntas. Mira; Los amigos son como los reyes
magos, no existen (son los padres, y no siempre) La familia no cuenta, no la elegimos, nos toca
en suerte o en desgracia, y pareja, verás, tengo un serio problema con el
compromiso (nos llevamos mal) Para tener compañeros de trabajo habría que
trabajar, y ese un precio muy alto para, a cambio, aguantar charlas estúpidas.
¿Qué más queda? No me entiendo ni con mi sombra (…por eso salgo de noche), y la
gente, por lo general, o me aburre o me molesta (¿por qué nacemos con lengua?).
Gracias que esta noche hablo con alguien, y es porque estás tú, si no lo haría
sólo (hablar)</p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p>Así pues, mis necesidades de relación son impertinentemente
limitadas. Camareros y poco más. Pero mi organismo, al revés que mi cerebro, es
normal, y tiene la molesta función de desarrollar algunas sustancias raras que
inducen a ciertos comportamientos más raros aún. La adrenalina la llevo bien,
por ejemplo (…la bajo con whisky). La dopamina la controlo (…o ella a mi)
solito (…y si no, llamo a un camello de guardia). Pero hay algo que se me
escapa de las manos (…bueno, de las manos, a veces), que es la puta testosterona
(…hasta el nombre asusta).</p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p>Es entonces cuando surge esa imperiosa necesidad de acercarme al sexo opuesto (…cuanto
más cerca, mejor). Disfruto, cierto, de su/tu compañía; inteligencia, encanto,
sensibilidad y valor. Todas esas virtudes de las que el hombre anda cojo,
suelen actuar como bálsamo en mi costra. Eso, sumado a otros agrados (…más físicos),
me empuja (…nos empuja) a la cama, y una vez allí, cuna de sueños y altar de
despertares, comienza la danza del deseo; mil veces repetida pero siempre imprevisible,
misteriosa…casi mística</p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p>Tras el sudor, los
besos, los latidos y jadeos, bordamos el final…y es ahí, en el fuego del
irremediable “Do de pecho” retardado, cuando tocas lo más intenso y mágico de
la relación humana, segundos antes de
caer, impotente (…nunca mejor dicho), en el sentimiento más profundo de
absoluta soledad. Paradójica y dura sensación. Al rato, te miro y estas aquí,
conmigo, separados por una sabana…tan lejos.</p>
<p class="MsoNormal">¿Echamos otro polvo? Hoy me siento sociable. Vaya, te has
dormido. No me extraña."</p><br /><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com32tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-68258928845739521392022-03-28T10:44:00.008+02:002022-03-30T20:42:03.083+02:00Bajón<p> </p><p><br /></p><p>(Tonecho)</p><p><br /></p><p></p><p class="MsoNormal"> "No es que a estas alturas de mi vida (por llamar a esta
mierda de alguna manera) me preocupen mucho los problemas, la verdad. Son parte
de mí, es más, yo soy uno de ellos. Pero este en concreto, me jode. Toca mi
autoestima (a veces la tengo), mi ego intermitente y la fibra sentimental.</p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p>Este cuerpo que Dios me dio, si es que existe (…Dios. El
cuerpo está aquí) tiene, de un tiempo a esta parte, el sádico capricho de estar
completamente desintonizado con mi mente en los escasos momentos sexuales que
intento disfrutar.</p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p> No amiga. No es culpa tuya, en absoluto. Bueno, si tiene
cierta culpa tu cálida desnudez de que ahora este jodido, pero no de que esto
falle (y no folle). Aún en el improbable caso de que tu cuerpo hubiese
defraudado a mi mirada, quedaría el tacto (…ah, la piel), infinitamente más
sabio que la vista, paciente y hermosa amiga.</p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p>¿La edad? No creo. Los de arriba pretenden que dure sano
hasta los sesenta y siete; y esta gentuza no suele equivocarse con sus putas estadísticas.</p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p>El alcohol y el tabaco descartados. No recuerdo haberlo
hecho nunca sin mis dos fieles compañeros. Quizá en mis primeras ofrendas a
Onán, no sé.</p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p>Podría influir el distanciamiento entre relación y relación
que por culpa de mi carácter tan sociable y dejadez sufro últimamente, pero aún
así, desde que era un chaval (breve, pero intenso), nunca he compartido la opinión
del sexo con frecuencia (la belleza no debe ser frecuente, se convertiría en
vulgar) Hay que coger (bien dicho) las cosas con ganas. Tampoco distanciarlo en
exceso, que si no corremos (…) el riesgo de irnos antes de entrar.</p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p>Pero lo mejor será olvidarse, cambiar de tema, disfrutar de
tu presencia (cúbrete, por favor), y recorrer, al ritmo de la música y tus
latidos, las zonas más erógenas del alma. Creo que te quiero."</p><br /><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com36tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-9405648082091847792022-03-23T11:25:00.002+01:002022-03-23T11:25:17.959+01:00Lluvia<p> </p><p>(Tonecho)</p><p><br /></p><p><br /></p><p></p><p class="MsoNormal"> Adoro la lluvia. Las razones son varias, a cual mejor. Una
es ver cómo se mojan los gilipollas (los que no lo son también, pero algo es
algo). Otra es que pasa desapercibida está manía mía de ir siempre despeinado,
pues detesto el peine y el espejo; no soporto <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>ver mi aspecto reflejado en un cristal
impertinentemente sincero, recordándome la necesidad de afeitarme, y que aún
encima está al revés (ya sabéis, la izquierda es la derecha y a la inversa, como
la vida misma). Me conforta además que el día, al ser gris, va al compás de mi
carácter tan alegre, y las nubes, compasivas, dan un aspecto romántico al
brillo etílico de mi mirar.</p>
<p class="MsoNormal">El ir sorteando charcos al andar retrasa el camino, y eso
para mí, que lo que me sobra es tiempo, es divertido. Imaginaos a un tipo medio
borracho (nunca me acabo de llenar) dando ridículos saltitos por la acera,
pisando charcos aún más grandes que los que pretende evitar y maldiciendo de
vez en cuando; soy yo. </p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p></p>
<p class="MsoNormal">Así hasta llegar al bar donde, con un café con chorro,
observas a tu amiga tratando de secar la mojadura que seguramente acaba de
mandar a la mierda media hora de maquillaje y alisado capilar. La pregunta es
inevitable ¿se le habrán mojado también las bragas?<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Es delicioso convencer a esta mujer lo bella
que está en este momento, con el rostro húmedo y el cabello goteante, limpia de
la publicitada imposición de ser mujer ante los ojos del consumo. </p>
<p class="MsoNormal">- Todos somos guapos cuando llueve, amiga (casi todos) Viéndote
así, empapada, me invade la sed. No sé si tomarme un whisky o secarte como los
gatos. Me encanta el sabor a piel (si hay sal en los pliegues, mejor). Optaré,
con tu permiso, por ambas cosas. En mi casa hay whisky, y la lengua la llevo puesta
(no siempre, pero hoy si). Cierto, me he puesto cachondo.</p>
<p class="MsoNormal">Pero cuidado, pues también es cierto que todos recordamos a
alguien cuando llueve. Se ponen bohemias las miradas, la memoria se detiene, el
tiempo retrocede y el deseo es lo único que nos puede salvar. Escapemos, no hay
tiempo que perder. No te seques más, y salgamos a nadar.</p><br /><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com28tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-4784510037935547402022-03-13T09:45:00.004+01:002022-03-13T09:48:59.371+01:00Mientras duermes <p> </p><p><br /></p><p><span style="font-family: arial;"> ( Tonecho)</span></p><p><span style="font-family: arial;"><br /></span></p><p><span style="font-family: arial;"><br /></span></p><p></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;"> Estas dormida y yo te miro casi sin querer, de reojo. Aprovecho,
mientras descansas, para reencontrarme con mis fantasmas, que me adoran (…y últimamente
me extrañan). También aprovecho, cobarde (…siempre lo he sido) para pensar con
la tranquilidad de saber que no me miras.</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">Es así, en la soledad del silencio, cuando me siento libre
(…la libertad en compañía es utópica). Es tu sexo (…que adoro) el que me ata,
amiga. Este lo representa tu mirada, que derrama susurros, y la certeza de tu
boca; por eso, duerme cielo….sigue durmiendo. Deja que me sienta hombre un poco
más; entre tus piernas no soy más que un niño, y necesito crecer, o creerme que
lo hago (…vivo en el engaño, si; me encanta; oculta la verdad, tan puta como siempre).</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">Ahora, al verte así, aparentemente inofensiva, un escalofrío
me recorre; algo que jamás había sentido: Cariño (…lo que hacer follar a
menudo). Si creyese en el amor, diría que estoy enamorado, pero no, es algo
infinitamente superior; es paz. Sé que estoy a gusto contigo, y eso me acojona.
Salta en mil pedazos mi rol inaccesible, mi independencia y mi encantadoramente
triste vida.</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">Ayer me di cuenta. Cuando el ritmo del aliento anunciaba un
intenso y cercano orgasmo, me pediste; - …Tone, correte en mi, no te
separes, quédate dentro. Yo obedecí (….mis sabanas lo agradecieron),
y en ese intercambio de calor, de humedad, de placeres, fui, por un instante,
padre, amante, hombre y mujer. Toqué la medula misma de la vida, y algo cambió.
Joder, aun no estoy borracho y mira como hablo. Solo me falta ponerme a llorar.</span></p>
<p class="MsoNormal"><o:p><span style="font-family: arial;"> </span></o:p></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">- ¿Tone, estas despierto?</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Veo de nuevo tu
mirada azul, y respondo:</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">- No, vida, estoy soñando. He tenido pesadillas. ¿Me secas
el sudor?</span></p><span style="font-family: arial;"></span><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com25tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-45289108255353158302022-03-05T17:50:00.002+01:002022-03-05T17:51:20.023+01:00Miope<p> </p><p><br /></p><p></p><p class="MsoNormal"> <span style="font-family: arial;"> Se dispuso a clavar sus colmillos en ese blanco, virginal y
hermoso cuello. Se marcho de repente, dando alaridos. Tarde se dio cuenta de
que se trataba de una estatua.</span></p><br /><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com21tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-67809339540871351522022-02-26T17:58:00.005+01:002022-02-28T17:36:36.987+01:00Tan lejos, tan cerca<p><br /></p><p> </p><p class="MsoNormal"><o:p> </o:p></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">No están aquí pero puedo oír sus gritos.</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">No están aquí pero puedo oler su sangre,</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">y su miedo,</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;"> y sus casas quemadas</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">No están aquí pero puedo ver su cara de sorpresa</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">y de terror</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">No están aquí pero estarán.</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">Si no vienen los soldados,</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;"> </span><span style="font-family: arial;">vendrán los cadáveres</span></p>
<p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;">a reclamar justicia,</span></p><p class="MsoNormal"><span style="font-family: arial;"> y será el fi</span><span style="font-family: arial;">nal.</span></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com28tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-15519476988674606172022-02-20T10:55:00.004+01:002022-02-27T22:02:33.419+01:00Vivir<p> </p><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>...buscar y encontrar lo prohibido</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>¿Pecado?</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>eres tú en mi retina</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>Pecar</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>cruzar esa línea,</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i> para ir más allá del deseo</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>Sudar</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>decirle que no a la prudencia y al miedo</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>Gozar</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>hacer olas de mar con la boca en tu piel</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>...y rezar</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>porqué jamas se termine este juego</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>...y amar</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>que pecar no es pecado</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>pecado es más bien no pecar.</i></span></span></div><div class="bi6gxh9e" style="background-color: white; color: #050505; font-size: 15px; margin-bottom: 8px;"><span class="d2edcug0 hpfvmrgz qv66sw1b c1et5uql lr9zc1uh jq4qci2q a3bd9o3v b1v8xokw oo9gr5id" color="var(--primary-text)" style="font-size: 0.9375rem; line-height: 1.3333; max-width: 100%; min-width: 0px; overflow-wrap: break-word; word-break: break-word;"><span style="font-family: arial;"><i>(Tonecho)</i></span></span></div>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com13tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-82127229693808810082022-02-10T18:19:00.001+01:002022-02-19T21:32:14.561+01:00Lenguaje inclusivo<p> </p><p class="MsoNormal"><span face=""Arial","sans-serif""><span style="mso-spacerun: yes;"> </span></span></p><p class="MsoNormal"><span face=""Arial","sans-serif""><br /></span></p><p class="MsoNormal"><span face=""Arial","sans-serif""> Por miedo a ser acusado de sexista, dejó de escribir cuentos y comenzó a escribir cuentas. Al final se hizo contable.</span></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com15tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-63144814401477912772022-01-24T18:16:00.004+01:002022-01-24T18:18:34.099+01:00Pasa la vida<p> </p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p><p></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span face=""Arial","sans-serif"" style="color: black; font-size: 12pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">
Agarrado al volante del coche, sin más paisaje que el auto que me
precede, observo, intentando mantener la poca calma que me queda. Empiezo a
sudar. No es el calor, tengo el aire acondicionado puesto, con su monótono runrún.
Es la angustia. La angustia de la insoportable quietud. Llevamos parados mucho
tiempo, avanzando cada diez minutos poco más de tres metros. El atasco parece
no tener fin.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span face=""Arial","sans-serif"" style="color: black; font-size: 12pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;"><o:p> </o:p></span><span style="font-size: 12pt;">Mis nervios flojean, dejando paso al inevitable instinto. Éste me empuja a
salir.</span></p><p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span style="font-size: 12pt;">Como en una ciega reacción temperamental, sin pensar, con la adrenalina a
flor de piel, bajo del coche y me subo a su techo. Oteo el horizonte y no
veo más que una inerte masa de vehículos encendidos, parados, expectantes;
prácticamente moribundos.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span face=""Arial","sans-serif"" style="color: black; font-size: 12pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;"><o:p> </o:p></span><span style="font-size: 12pt;">Esta nueva óptica me empuja a caminar. Lo hago sobre los coches, saltando
de techo a capó y de capó a techo, rápido y hacia delante. Mientras avanzo, los
demás conductores me insultan y me gritan. No es por pisar sus coches. No, eso
es la excusa. En realidad me insultan por avanzar, por salirme de la norma del
atasco. Tampoco yo camino por desesperación, ni por agobio. Eso fue al
principio, en las primeras zancadas. Ahora que llevo un buen trecho recorrido
es la curiosidad la que me mueve.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span face=""Arial","sans-serif"" style="color: black; font-size: 12pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;"><o:p> </o:p></span><span style="font-size: 12pt;">Me llama la atención que bajo mis pies dejo atrás todo tipo de vehículos.
Viejos, lujosos, familiares, deportivos; pero todos tienen algo en común; están
parados. En un atasco, como en la muerte, todos somos iguales.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span face=""Arial","sans-serif"" style="color: black; font-size: 12pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;"><o:p> </o:p></span><span style="font-size: 12pt;">Al fondo, algo empieza a cambiar. Una inmensa y densa niebla me impide ver
más allá.</span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span face=""Arial","sans-serif"" style="color: black; font-size: 12pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">Despacio, muy despacio, continúo. No veo absolutamente nada. Oigo ruido de
golpes, y algún lejano grito que se pierde. Paro en seco y me agacho,
agudizando mi vista al máximo. Lo que descubro me petrifica. Muy cerca de mi
esta el final del atasco, y el motivo de éste.<o:p></o:p></span></p>
<p class="MsoNormal" style="background: white; line-height: normal; margin-bottom: 0cm;"><span face=""Arial","sans-serif"" style="color: black; font-size: 12pt; mso-fareast-font-family: "Times New Roman"; mso-fareast-language: ES;">Un gran cráter de varios kilómetros de profundidad se abre en la tierra, y
por él van cayendo, inevitablemente, todos los coches que despacio y a ciegas
se acercan. Sin tiempo para ver, ni para pensar; tan solo para gritar.<o:p></o:p></span></p><br /><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com18tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-83172843574151890952022-01-16T11:50:00.005+01:002022-01-16T11:52:21.344+01:00Envidia<p> </p><p><br /></p><p><br /></p><p></p><p class="MsoNormal"> Unos a otros se consolaban. “Lo importante es participar”,
se decian deportivamente. Pero cuando el óvulo entregó el premio de la
fecundidad al ganador, muy pocos aplaudieron. Y eso que eran millones.</p><br /><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com16tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-30269087537923428232022-01-09T12:13:00.005+01:002022-01-09T12:13:42.316+01:00Ecologismo<p> </p><p><br /></p><p><br /></p><p> </p>
<p class="MsoNormal"> Tan concienciado y seguro estaba de que el deterioro del
planeta era culpa del hombre, que dejo su oficio y se hizo sicario.
Evidentemente, se deshacía de sus víctimas en el contenedor de “residuos orgánicos”.</p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com15tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-84960494199884306702021-12-18T20:27:00.003+01:002021-12-18T20:27:45.055+01:00Tradición<p> </p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p><p></p><p class="MsoNormal"> Decidieron celebrar la navidad juntos en familia y así lo
hicieron. Todos apagaron sus teléfonos móviles.</p><br /><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com20tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-20523360508983010012021-12-13T19:00:00.005+01:002021-12-13T19:00:59.925+01:00Consecuencia<p> </p><p><br /></p><p><br /></p><p> </p><p class="MsoNormal"> "¿Qué si tengo algo que añadir? Hombre, pues algo si, mire
usted. Verá, nací en un barrio pobre y esas cosas que ya habrá oído usted
tantas veces. Mi padre se mató en la obra siendo yo un chiquillo, y a mi vieja
le toco criar a cuatro hijos ella sola, doblando turnos y sin apenas vernos.
Digamos que nos educamos solos, entre nosotros, y así salió el experimento.
Luego, si añadimos las bromas en el colegio por ir siempre con la misma ropa
remendada y sin bocata, que los niños son muy cabrones, pues claro, la
consecuencia es que crecí siendo un autentico hijo de puta resentido.</p>
<p class="MsoNormal">Comencé a robar siendo bien chaval. Dicen que el dinero no
da la felicidad, pero ser pobre tampoco. Además estaba harto de ver a mi madre
matarse día tras día. Y así empecé, con pequeños hurtos. Me compraba zapatillas
nuevas, iba al burguer a comer y le dejaba pasta a mi vieja, que aunque no
aprobaba mi vida también se daba cuenta de que era eso o la miseria. Hoy en día
no te dejan trabajar siendo menor, los listos. Pues a robar.</p>
<p class="MsoNormal">Claro que no todo el monte es orégano y como no, llegaron
los internados y los correccionales, de donde salí todavía más cabrón. Y así
hasta hoy, que ya pasaré a mayores, después de lo que <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>dicte usted.</p>
<p class="MsoNormal">¿Qué por qué lo hice? Porque las farmacias y joyerías ya
apenas tienen efectivo, con eso de las tarjetas, y ya tocaba un banco. ¿Por qué
le dispare al guardia? Yo le apunte al pie, y casi le vuelo las pelotas, al
pobre. Pero mire, señor juez, el me iba a disparar a mí, o eso dijo. Además, si
tengo que ir pa’dentro no quiero entrar como un pringao. Es una carta de presentación,
que me tomen por loco, así me respetan.</p>
<p class="MsoNormal">¿Qué cómo me declaro? Hombre, pues supongo que culpable. Eso
sí, con matices, señoría, con matices."</p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com11tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-60777288316650441612021-12-09T17:45:00.010+01:002021-12-12T19:42:43.014+01:00CRISIS DE FE 2 Parte (Reverso)<p> </p><p><br /></p><p><br /></p><p></p><p class="MsoListParagraphCxSpFirst" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";">
</span></span></span><!--[endif]-->Perdón, padre, porque he pecado.</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";">
</span></span></span><!--[endif]-->Dígame doctor, en confianza.</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";">
</span></span></span><!--[endif]-->Creo, padre, que he perdido la fe en la ciencia.</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";">
</span></span></span><!--[endif]-->Explíquese.</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";">
</span></span></span><!--[endif]-->Mire, como psiquiatra tengo acceso a multitud de
problemas y debilidades humanas, pero no todas con solución. Hay veces que me
siento como un curandero recetando potingues milagrosos que ya se de antemano
que no son la solución. Trastornos que se escapan de mis manos y mis
conocimientos. Mi capacidad de comprensión tiene cada vez más limites, y cuanta
más experiencia, más dudas. Esa misma experiencia que me ha demostrado que
existen problemas sin solución. Por mi consulta pasan psicópatas potenciales,
pederastas, maltratadores sádicos. Personas que solo un ente superior, como su
Dios, puede tratar, o juzgar. Casos en los que una terapia solo atenúa, jamás
cura. Respuestas que la ciencia no me da. He aprendido que el mal existe,
padre. Genético y educacional, y la impotencia se convierte en fraude dentro de
mi cabeza. Yo no les puedo mandar rezar, ni convencerles de que se arrepientan,
tan solo les doy unas pastillas que no nos engañemos, son como lacasitos para
un adicto. Mi vocación se diluye, padre, y cada vez interactúo menos con mis
pacientes. Escucho, escribo y que pase el siguiente. Es curioso, pero yo, que
siempre había renegado de la religión, cada vez la veo más cercana. Creo que
necesito creer, por eso vengo. Me facilitaría tanto la vida saber que hay un
Dios…</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";">
</span></span></span><!--[endif]-->No sabe usted como le entiendo, doctor.</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";">
</span></span></span><!--[endif]-->Pues esta es mi confesión, padre.</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";">
</span></span></span><!--[endif]-->Le mandaría rezar dos padre nuestros, si se los
sabe, pero no creo que sea necesario ¿no?</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpLast" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";">
</span></span></span><!--[endif]-->Los rezaré, que nunca se sabe.</p><br /><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com8tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-17491920054766393462021-12-06T11:23:00.002+01:002021-12-06T12:13:30.271+01:00CRISIS DE FE 1parte (Anverso)<p> </p><p><br /></p><p><br /></p><p><br /></p><p></p><p class="MsoListParagraphCxSpFirst" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]-->Buenos días padre, acomódese ¿Qué tal la semana?</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]-->Buenas, doctor. Igual o peor. Siguen latiendo
mis problemas, o más que problemas, preocupaciones. Siento un vacío que cada
vez se hace más grande y creo que es la ausencia de Dios. O tal vez sea
predicar en el desierto, que termina quemando. Creo que he tirado la toalla
hace tiempo y lo que tengo ahora es monotonía laboral.</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]-->¿Ha perdido usted la fe?</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]-->Sinceramente, creo que sí. Verá, de joven,
cuando no era más que un novicio, era todo ilusión, como un idealista con su
ideal o un enamorado con su pasión, pero luego empiezas a ejercer y te vas
asentando en la realidad, y tanto la pasión como los ideales se difuminan,
igual que la fe, y ya todo se vuelve más pragmático. Calas a la gente, sus
inquietudes, sus miserias, y vas abriendo los ojos hasta que dices “¿es esto la
obra de Dios?”. Mire, doctor, de toda mi parroquia cuento con los dedos de una
mano, y sobran dedos, auténticos devotos. La mitad vienen por tradición, por
cumplir trámite, y la otra mitad por miedo a que de verdad exista algo. Por
amor al creador vienen dos a lo sumo. Y luego está el confesionario. Las cosas
que uno escucha, más propias de su consulta que de la mía. Y tengo la
obligación de perdonar, cuando en vez de mandar rezar ave marías les daría un
par de hostias a más de uno, pero hostias de cinco dedos, no obleas. Parece
mentira que la gente crea con facilidad que le va a tocar la lotería y en
cambio les cuesta un mundo creer en algo superior, es curioso. Solo hay una mujer
que me devuelve la cordura. Es callada, nunca va en domingo, sino a diario,
cuando menos visible esta. Tiene la paz en el rostro. Llega, escucha, reza y se
va. Nunca se confiesa. Sé que es feliz, una creyente convencida, que siente a
Dios en cada bocanada de aire, que para ella vivir es un regalo divino, y así
se lo toma, con la máxima humildad. Me han contado que apenas tiene recursos,
pero que afronta los problemas con una sonrisa y jamás habla mal de nadie, dígame
¿Cuántas pastillas necesitaríamos nosotros para sentir su bienestar? No sabe
usted como la envidio. Quizás sea por ella que sigo en la trinchera, doctor.
Puede que sea la señal que Dios me ha enviado, a saber.</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpMiddle" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]-->Dígame, padre ¿Por qué viene usted a terapia?</p>
<p class="MsoListParagraphCxSpLast" style="mso-list: l0 level1 lfo1; text-indent: -18pt;"><!--[if !supportLists]--><span style="mso-ascii-font-family: Calibri; mso-bidi-font-family: Calibri; mso-fareast-font-family: Calibri; mso-hansi-font-family: Calibri;"><span style="mso-list: Ignore;">-<span style="font: 7pt "Times New Roman";"> </span></span></span><!--[endif]-->Por lo mismo que usted va a misa, doctor, para
aliviarme. Para aliviarme.</p><br /><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com12tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-2484003580053636502021-11-27T19:30:00.003+01:002021-11-27T19:37:26.252+01:00El barco<p> </p><p><br /></p><p><br /></p><p></p><div class="separator" style="clear: both; text-align: center;"><div style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj_Si2KDkec_peDkXHXUPAj3MkRHIC0ijlZg2HFpTuzI6SwGPPbJssS1dERbzR3DJ-qXqx9HOlSCH38ES1WPIbwhbSzfvVgLE_b340p803GOy1XyFow_8C1k6NcSBB5f2rocjZJgajty4U/"><img alt="" data-original-height="558" data-original-width="890" height="243" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj_Si2KDkec_peDkXHXUPAj3MkRHIC0ijlZg2HFpTuzI6SwGPPbJssS1dERbzR3DJ-qXqx9HOlSCH38ES1WPIbwhbSzfvVgLE_b340p803GOy1XyFow_8C1k6NcSBB5f2rocjZJgajty4U/w400-h243/image.png" width="400" /></a></div><br /></div><br /><p></p><p><br /></p><p></p><p class="MsoNormal"> Voy a contaros un cuento de marinos, o más bien un cuento de
personas, pues la moraleja del mismo viene a decir lo complicados, y
paradójicamente simples que podemos llegar a ser.</p>
<p class="MsoNormal"> Era un joven pescador qué, como todas las mañanas, salió con
su barco a faenar. Llevaba provisiones para el día, pero una violenta tormenta
lo tuvo a la deriva por más de tres jornadas, sin rumbo, sólo en el océano.
Incapaz de hacerse con el control del barco, sediento y terriblemente cansado,
rompió a llorar. Luego rezó, y entre oraciones se quedó dormido.</p>
<p class="MsoNormal"> Al despertar, lucía un sol espléndido y el mar estaba en
calma. Comprobó que el bote no sufría desperfectos y se alivió. A lo lejos
avistó tierra. Quizá fuese un islote que no figuraba en el mapa. A saber
cuantas millas había navegado. Allí se dirigió, con la esperanza de encontrar
agua dulce. Al llegar, soltó el ancla y a nado se acercó a la playa. Para su
asombro, un grupo de nativos, semidesnudos, le estaban esperando. A duras penas
y con gestos se hizo entender. Aquella gente era amable y acogedora . Le
condujeron hasta su poblado, que era un grupo de chozas echas de arcilla y
paja. Le dieron agua y comida y le invitaron a descansar.</p>
<p class="MsoNormal"> Y así paso un tiempo. Aprendió su idioma, su manera de
vivir, sus costumbres y su filosofía. Eran felices con poco, y él también era
feliz. Sintió, por primera vez en su vida algo parecido a la libertad, era
dueño de sí mismo. Cada día era diferente, sin preocupaciones, nada más que
alimentarse y vivir, con tiempo para pensar, caminar, reír. Incluso aprendió a
cazar.</p>
<p class="MsoNormal"> Una joven se fijo en él, y él en ella. Empezaron a pasar
tiempo juntos, a solas, y terminaron uniéndose. Construyeron una casa y fueron
agasajados como nueva pareja ¡Dios, aquello era el paraíso! Tuvieron hijos y
así pasaron los años. Era un hombre nuevo, con una familia de verdad en el
lugar más bello y virgen que se había imaginado.</p>
<p class="MsoNormal"> Mas una noche una terrible tormenta sacudió la isla de norte
a sur. Hubo daños. Algunos tejados habían volado e incluso algún árbol cayó.
Pronto se pusieron a reparar los desperfectos, pero nuestro joven protagonista
descubrió, horrorizado, que su barco se había hundido. ¿Horrorizado por qué? Os
preguntareis, pues no lo utilizaba y allí era feliz ¿Para qué quería el barco?
Tampoco él lo sabía, pero cambió. Dejó de ser feliz. Dejo de reír, de amar la
vida, de sentirse afortunado. Incluso la presencia de su amada y de sus hijos
le incomodaba, y cayó en una profunda depresión, de la que jamás se recuperó.</p>
<p class="MsoNormal"> Puede que aquel barco representase para él la libertad de
elección, la oportunidad de marchar si algún día así lo decidiese, aunque nunca
llegase ese momento. Y es que lo queremos todo. Ese es el problema.</p><br /><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com17tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-57685897841059324572021-11-01T10:44:00.003+01:002021-11-01T10:45:42.002+01:00Virgen<p> </p><p><br /></p><p></p><p class="MsoNormal"> Era un matrimonio normal. De esos que cuadran cuentas a
diario para llegar a fin de mes. Ella limpiadora, él repartidor.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Supervivientes, como tantos.</p>
<p class="MsoNormal"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Como suele ser
habitual en estos casos, querían un futuro mejor para su hijo, su único. Un
futuro en el que él decidiese que hacer con su vida, y no la vida que hacer con
él. Para ello, y tras mucho meditar, tomaron una drástica decisión. Sacaron al
niño del colegio en cuanto tuvo la primaria. Lo matriculaban, eso sí, pero sólo
para hacer el paripé con asuntos sociales, mas el chico no iba a clase, se
quedaba en casa. La idea era preservar su cerebro intacto, carente de
información y con la mínima cultura. Sabía leer, sumar y escribir, poco más, y
cualquier pregunta que <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>hacía era
respondida con evasivas, o con un: “lo sabrás llegado el momento”. Y así
creció, en la más profunda ignorancia, hasta que, como había augurado su padre,
los principales partidos políticos conocieron su caso y se fijaron en él.</p>
<p class="MsoNormal">Le llovieron ofertas. Tenía el cerebro perfecto para ser
dogmatizado desde cero. Era un libro en blanco, un filón. Le esperaba, como le
decían, una larga y exitosa carrera por delante, cosa que se cumplió con creces.</p>
<p class="MsoNormal">Cuando se decantó por una de las ofertas, lo reeducaron, o
mejor dicho, lo educaron. Aprendió todo lo que le quisieron <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>enseñar desde una sola óptica, y obtuvo un
discurso veraz, creíble, pues él estaba convencido. Solo existía una verdad en
sus palabras, que es lo que vende en estos tiempos. Y llegó lejos. Muy lejos.</p>
<p class="MsoNormal">Lo orgullosa que se sentía su madre, cuando hablaba de él
con su vecina, cuyo hijo había estudiado para juez. “Quien sabe, Mari, puede
que tu chico termine trabajando para el mío”. </p><br /><p></p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com19tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-74112792998478820212021-10-25T08:21:00.006+02:002021-10-25T15:15:09.906+02:00Vocación <p><br /></p><p><br /></p>
<p class="MsoNormal"><o:p> </o:p></p>
<p class="MsoNormal"> "Tienes toda la razón, socio. Yo también conozco un caso
parecido al que me cuentas. Un tío que empezó desde abajo, y llegó lejos.</p>
<p class="MsoNormal"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Era un chaval de mi
barrio, buen tío, normalito, pero con un talento especial para las drogas. Le
gustaban todas, especialmente la coca, aunque no le hacía ascos a nada. Tenía,
como te digo, algo especial. Era una especie de sumiller del perico. Entre su
experiencia, que era mucha, y un sexto sentido innato para catar, lo detectaba
todo. Procedencia, si estaba cortada, como era la subida, el bajón…todo. Un
hocico fino, vaya.</p>
<p class="MsoNormal">Empezó pillando para los colegas.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Nunca se equivocaba y sabía donde encontrar
farlopa<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>de la buena. Con estos pequeños "trapis" , a él le salía el tema <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>gratis.
Bien, pero, como tonto no era, un día se dijo:”Coño, aquí hay negocio”. Y así
fue. Se corrió la voz y al poco le vendía a todo el barrio. En la calle, el
boca a boca funciona, y como siempre vendía tema bueno, le sobraban compradores.
Incluso se permitió cortarla en más de una ocasión, pues sabía de sobra con qué,
y que no se notase.</p>
<p class="MsoNormal">Luego vinieron los clientes especiales. Esos pijos que te
piden algo bueno para follar, o para una fiesta, o para estar de tranquis, y
claro, como él era un experto, les asesoraba de la hostia.</p>
<p class="MsoNormal">Total, que el negocio creció. Contrató gente para el menudeo.
Empezó<span style="mso-spacerun: yes;"> </span>a mover cantidades tochas, y se
hizo un nombre. Incluso la pasma <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>le
respetaba. Nunca hubo una sobredosis y nunca un marrón de sangre. Todo
controlado. Sin malos rollos. Llegó un momento que tenía tanta pasta, en negro,
claro, que incluso cuando le ponían una multa se alegraba, por qué, como él
decía: “Así contribuyo con el estado”.</p>
<p class="MsoNormal">Pero un buen día todo se jodió. Llegaron las multinacionales,
y adiós. Bandas de fuera con mucha pasta y con mucha peña. Vendiendo barato y a
todas horas. En todas partes. Una plaga.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></p>
<p class="MsoNormal">Le dieron dos alternativas. Coger un dinero por retirarse, o
movida. Y como las movidas no eran su rollo, se jubiló. Andará por algún parque
viendo como "gramean" <span style="mso-spacerun: yes;"> </span>los chavales. Con
cuarenta tacos, tampoco está mal.</p>
<p class="MsoNormal"><span style="mso-spacerun: yes;"> </span>Pero en la calle nada
volvió a ser lo mismo. Es todo mucho más frío, sin implicación personal.
Llegas, pillas y te vas. Ni los buenos días, colega. En cierta manera se le
extraña. </p>
<p class="MsoNormal">Más o menos como el ferretero que me cuentas, que llegó el
“Leroy Merlin” y a la mierda.El pez grande se come al chico. Así con todo. Vaya asco de vida."</p>cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com13tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-27222662528111448922013-11-24T12:02:00.000+01:002013-11-24T12:04:08.880+01:00Entretenimiento en negro<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Me presento; mi nombre es Bruno y me dedico a matar gente.
Gente que estorba. O gente que estorba a mi jefe, mejor dicho. Es, mi jefe,
un hombre importante, poderoso. La mitad de la droga que se mueve en esta
ciudad pasa por sus manos; es decir, que trabajo no me falta, gracias a Dios.<br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Aunque pueda parecer vanidoso, he de decir que soy bueno en
lo mío. Muy bueno. Jamás dejo huellas ni pistas que seguir. Tanto es así, que
cuando me cargo a alguien todos saben que he sido yo; todos menos la poli,
claro. Quizás, por eso, me siento un tanto incomodo con este último encargo. Sus palabras fueron estas : " Bruno, mi mujer se ve con otro
tipo, me la está pegando. Entérate de quién es y bájatelo"</div>
<div class="MsoNormal">
Al ser un tema personal, no de negocios, ha de parecer una
chapuza. Que nadie crea que ando yo por medio.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Hago lo que haría
cualquier novato; comprar una pistola
"sucia" en el mercado negro. Una de estas pipas con pasado turbio; Algún
marrón de atraco o ajuste de cuentas, a saber. Algo que se relacione con una
pista falsa. Con esto y un buen plan será suficiente. Puedo proceder.</div>
<div class="MsoNormal">
He quedado con mi jefe en un descampado fuera de la ciudad.
Nadie lo sabe, ni su socio, ni sus amigos, nadie. Quiere prudencia, es su honor
el que está en juego y sólo se fía de mí para estas cosas. Ser un cornudo no es
plato de buen gusto, supongo, y además no está bien visto, no sé por qué.</div>
<div class="MsoNormal">
Veo
su coche a lo lejos. Me acerco, abro la puerta y me siento a su lado.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
- Hola Bruno ¿lo has hecho? Dice sin mirarme.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
- Aún no. Respondo mientras pego el cañón del revólver en su moflete.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
- ¡ ¿Pero qué haces?!</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Tranquilamente le miro, esta atónito, confuso. Siento su
miedo.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
- Me dijiste que matara al que se tira a tu mujer ¿no? Pues
eso.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
- ¡Pero yo soy su marido, imbécil!¡Al otro, me refiero al
otro!</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
- El "otro" soy yo- digo antes de disparar. Le
meto dos tiros en la cara, y luego vacío el cargador sobre su cuerpo. Que
parezca hecho con miedo, o rabia. Da igual. Después le quito la billetera, y ya
puestos, corto su nariz; la pasma está obsesionada con las bandas latinas,
puede que les dé por investigar por ahí; con estos inútiles nunca se sabe. Echo
un vistazo rápido, a modo de despedida, digo "ciao" como en las pelis
y me voy.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<br />
<div class="MsoNormal">
Ya sólo me queda llamar a Carla y darle el pésame. Seré el
primero, eso seguro. No le diré que he sido yo, claro. Con las mujeres nunca se
sabe; lo mismo le da pena y la jodimos. Me mostraré cariñoso y protector. Necesitará a
alguien que la consuele, y de paso le ayude en los negocios del difunto. Puede contar conmigo, ahora
estoy en paro.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com19tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-49800460686359894112013-10-16T12:36:00.003+02:002013-10-16T12:37:24.861+02:00El valor<br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<div class="MsoNormal">
Estoy sentado en un café, ojeando la prensa mientras
desayuno. El local es amplio y está bastante concurrido a esta hora. De entre
la gente que puebla la barra, dos individuos llaman mi atención, y no solo la
mía, sospecho. Son dos jóvenes, visiblemente cargados de copas que se agarran,
casi literalmente al mostrador. No son voceras, ni molestos, simplemente se les
adivina una larga noche de alcohol y fiesta a sus espaldas. Ojos rojos, mirada
perdida y desaliño en su vestir. Por lo demás, están a lo suyo, hablando, o
tratando de hacerlo, entre ellos; a su rollo.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Al parecer, la necesidad aprieta, y uno de ellos, tras dar
un lento vistazo en derredor, ve, no sin esfuerzo, el cartel de los servicios,
que están en el extremo opuesto del local. Hace una seña a su colega y se
aventura, sólo, a despegarse de la barra
e iniciar el previsiblemente largo camino al baño.</div>
<div class="MsoNormal">
A los pocos pasos la cosa se complica. El muchacho pierde el
equilibrio, y tras unas aparatosas curvas y meneos, tiene que agarrarse a una
de las mesas para no caer. Con los tremendos bandazos ha tirado un par de
sillas; su cara esta blanca, los ojos entornados y las piernas separadas
formando una extraña y llamativa estructura de sostén.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
El bar ha enmudecido; todas las miradas se clavan en el
chico; sorprendidas, asustadas, inquisidoras; desafiantes algunas. Todos
aguardan el siguiente movimiento. Nadie se levanta. "Joder- pienso- de ser
un ciego, una embarazada o un abuelo habría ya media docena de manos
ayudando". Tampoco yo le socorro, quizás por timidez, o tal vez por qué
soy igual de capullo que el resto.</div>
<div class="MsoNormal">
Tras un largo y denso silencio, su amigo, que no ha perdido
detalle, toma aire, un buen trago de su copa y, cerrando los ojos, decidido, se
dirige al sitio donde se ha bloqueado su colega. Sin saber ni cómo, reúne el
valor y la pericia necesarias para agarrar a su amigo por la cintura y,
encontrando el punto de gravedad de ambos, lo conduce, despacio y a
trompicones, a los servicios. Ha sido largo, costoso, agobiante, como culminar
una montaña o correr un maratón, lo sé. Ahora por fin están los dos dentro,
refrescándose la cara, meando y lo que necesiten hacer.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
La escena me recuerda, inevitablemente, a esos heroicos
soldados que en el frente, sorteando balas enemigas y jugándose el culo,
retroceden para cargar sobre los hombros a su compañero herido. Ya, estos
últimos arriesgan la vida, cierto. Pero este, el que hoy he visto, se jugó, y
perdió, a los ojos de la mayoría, la vergüenza, que a veces importa más que la
vida misma. Son actos de valor, por igual; motivados ambos por amistad,
compañerismo; decencia.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<br />
<div class="MsoNormal">
Me despierto. Todo ha sido un sueño; estoy empapado en
sudor. Me ducho y bajo a desayunar. He pedido café y copa. Quiero seguir el
camino de la gloria.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
</div>
cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com11tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-30625318954416983952013-03-07T20:12:00.000+01:002013-03-07T20:13:49.038+01:00Y al final, juntos de nuevo<br />
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
¿Caprichoso el destino, dices? Mejor di cabrón, y aciertas.
Mira, he visto cosas en la vida que la única explicación que encuentro es la de
la broma macabra, o la putada.</div>
<div class="MsoNormal">
Te contaré una de esas que es para mojar pan, escucha: Eran
dos chavales de mi barrio, hace ya bastante. Serían los ochenta o así, en plena
fiebre de la heroína en Madrid. Recordaras que de aquella se pasaba del canuto
al pico, así, en un “plas”.</div>
<div class="MsoNormal">
Bien, estos tíos que te digo eran gemelos; no igualitos,
pero gemelos. Habrás oído mil historias sobre gemelos, eso de que tienen una
especie de conexión especial, o algo parecido, tipo telepatía. Vamos, como un
sexto sentido entre ellos. Te pasará como a mí, que no me creía ni papa de esos
rollos, pero deja que acabé la historia y verás.</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Estos dos no eran nada especial, salvo para su madre, claro,
que los tenía consentidos de la hostia. Hasta el viejo se lo decía: “María,
joder, que no son los más guapos y chulos del barrio, coño, que se lo van a
creer”, y claro, les paso lo que les suele pasar a los nenes mimados que no
reciben un guantazo a tiempo; lo mismo que hoy salen gilipollas, antes se hacían yonquis. Ahí es donde entro
yo, que por aquel entonces me ganaba la vida vendiendo jaco a los chavales. Aquello
era una bola para los talegueros como yo. Salías de la cárcel, juntabas un poco
de pasta para mover medio kilo de caballo y te forrabas.</div>
<div class="MsoNormal">
Cuando conocí a estos dos estaban ya enganchados de cojones.
Se querían, si; inseparables y toda esa historia, pero eran yonquis y un día
pasó lo que termina por pasar en estos casos. Uno fue a pillar para los dos y
se lo acabó metiendo todo él. Cuando el otro se enteró, lo típico; se liaron a
hostias y se dejaron de hablar. Cosas de yonquis, ya sabes; puedes cagarte en
su puta madre pero no tocarles la papelina, eso es sagrado.</div>
<div class="MsoNormal">
Pasaron un par de
años. Yo les seguía vendiendo. Eso sí, hacían todo lo posible por no coincidir.
Si uno venía por la mañana, el otro lo hacia por la noche. Yo a lo mío; como
mucho les informaba, en plan: “ha estado tu hermano por aquí”. Silencio, o un
seco:” que le den por culo al cabrón ese”</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Un día todo se fue a la mierda. Trincaron a quien me
suministraba y tuve que cambiar de proveedor. Aún hoy día no se bien si lo que
me vendió era demasiado puro o es que estaba cortado con mierda, pero resulto
ser una bomba. Cayeron como moscas. Que yo sepa palmaron cinco habituales,
todos por sobredosis, que es como le llaman los médicos al “chungo”. Yo me tuve
que pirar echando leches, y para no volver. Por un lado me buscaba la pasma y
por otro los piezas y los que casi pillan. Calcula.</div>
<div class="MsoNormal">
Con el tiempo me enteré que entre los que murieron estaban
los dos hermanos, ya ves. Palmaron el mismo día, tío, como gemelos de peli mala.
Nacieron y murieron a la vez, y además de lo mismo. Lo que te dije, el puto
destino.</div>
<div class="MsoNormal">
La lápida que les puso la vieja tuvo su gracia:</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
“Que la muerte una para siempre lo que la vida separó”</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Hay que joderse.Tendría que haber puesto: Que la droga una
para siempre lo que la droga separó, ¿no crees?</div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com17tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-73243804535186983452013-02-07T22:10:00.002+01:002013-02-08T00:16:21.577+01:00Vacío existencial, lo llaman<br />
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
Quien te ha visto y quien te ve ¿Qué te ocurrió para acabar
así? Caer de lo más alto es doloroso, aunque fácil; se puede hasta prever, pero
amigo, quedarse en ese punto intermedio tan anodino y gris, donde ni se ríe ni
se llora, es lo peor. Es el vacío.</div>
<div class="MsoNormal">
En cierta manera la vida es como el cine; hay secundarios y
principales. Gente, la mayoría, más acostumbrada a moverse en aguas tibias,
planos intermedios, persiguiendo tan solo aquello alcanzable. Son los que
triunfan.</div>
<div class="MsoNormal">
Tú, en cambio, siempre fuiste líder…bueno, casi siempre. Rey
de tu vida, príncipe del barrio y de la noche ¡Ah! Eras la envidia. Mimado por
las chicas, jaleado por los muchachos, a tu lado la fiesta era rutina y el
aburrirse tabú.</div>
<div class="MsoNormal">
¿Cuánto se puede uno reír? ¿Y gozar? Tú conoces los límites;
todos los superaste.</div>
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Llegó un momento en el que no concebías la vida sin placer.
Si, corriste toda una larga juventud sin volver la vista atrás, sin apenas
sufrir, sin pensar, y todo te salió a pedir de boca. Pero llegó, de repente y
sin preaviso, el amor. Ah, esa chica, con lo inexperto que eras tú en eso del
querer. Pronto congeniasteis. Os amabais y hacíais una bonita pareja. Ella,
como era de esperar, te pidió que frenaras un poco tú vida, que te centrases.
Fuiste dejando la barra, la noche, los placeres secundarios y cediste a una vida
para la cual no estabas preparado. Hogar. Todo fue un sueño con fecha de
caducidad. Ella, como cualquier pareja, te fue pidiendo cada día más, y tú, sin
darte ni cuenta, cediste y cediste hasta perder tu propia personalidad. Las
relaciones, amigo, son una lucha cuerpo a cuerpo; no puedes abusar, pero
tampoco perder el pulso, como tú.</div>
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Tanto cambiaste, tan manso te volviste, que incluso ella te
terminó dejando. Lógico, ya no eras quien un día la enamoró. Y ahí te quedaste,
en la cuneta. Que manera de sufrir, compañero. Mordiendo el polvo del abandono,
la soledad forzada, el miedo. </div>
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Cuando quisiste volver a tu pasado ya era tarde. Diez años
fuera de la noche es demasiado tiempo; todo cambia, incluso uno. Ya había
nuevos reyes, nuevas risas y tuviste que entrar por la puerta de atrás. Ya
sabes, la del alcohol y la derrota. Con poco dinero y mucho que llorar es fácil
derrumbarse, y los perdedores no son bien recibidos en ese mundo, ni en
ninguno.<br />
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El pasado te dio la espalda; incluso el suicidio falló.
Es tan caprichosa la muerte, que por mucho que la llames con pastillas y torpes
tajos en las muñecas si no quiere venir, no viene…es mujer, al fin y al cabo.
Nada, tan sólo dolor, mucho dolor. Pero aún así, fíjate lo que te digo, eras
alguien ¿verdad? Si, la autocompasión reconforta. Caíste, claro, en el alcohol.
Dos o tres años borracho ¿Qué más da el tiempo? Pero siempre hay alguien que se
empeña en rescatarte, y estas tan débil y desesperado que en vez de mandarlo a
la mierda, le sigues ¿Quién fue? Tu padre, creo; el mismo que te dijo “para
salir adelante en esta vida, chaval, debes llenarla, y cuando ya no la puedas
llenar tú, deja de ser el protagonista de ella. Ponte en segundo lugar; serás
feliz” Que razón tenía el viejo. ¿Eh? Por eso la gente hace hijos, tiene mujer,
o busca a alguien que le quiera, y en quien pensar. Te curaste. Saliste del
alcohol, pero no le hiciste caso al bueno de tu padre y ahí estas, como único actor, rebuscando en
un pasado que no encuentras, que ya, lo que es peor, ni duele.<br />
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¿Qué puedes hacer ahora? Ya nada. Tocaste los dos polos
¿cómo pedirte que te quedes en el centro? Imposible ¿Matarte? Para que, si ya estas
muerto. Además, ahora mismo te falta el valor que en su día tuviste, el que da
la desesperación; pero ya ni eso, amigo ¿Drogas? Sabes bien que estas tan solo
potencian nuestro ánimo; si estas bien, te multiplicas, si estas mal quieres
morir, pero si como tú, no estas…desapareces ¿vegetal? puede.</div>
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Tan solo una cosa puedes hacer ya, a modo de suicidio emocional;
subir el volumen del televisor, para así no escuchar el incomodo silencio de tus
recuerdos.</div>
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cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com14tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-53096488543485594912013-01-23T18:40:00.000+01:002013-01-23T18:46:16.027+01:00 ¿Lo largo o lo eterno?<br />
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Un relato ucrónico</div>
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En un presente imaginario. <st1:personname productid="La Habana" w:st="on">La Habana</st1:personname>, enero de 2013</div>
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- ¿Qué es lo que ocurre, Ernesto? Andas muy pensativo
últimamente. Te conozco bien, amigo; algo hierve por debajo de tu gorra. Dime.
Te noto esquivo y huraño ¿Qué te inquieta?</div>
<div class="MsoNormal">
- Sabía que me acabarías preguntando, viejo zorro. Nada se
te escapa.</div>
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- Será mi sangre gallega</div>
<div class="MsoNormal">
- No sé como contarte, como hacerme entender. No tengo tu
oratoria, Fidel, lo sabes.</div>
<div class="MsoNormal">
-Tú y yo casi nos entendemos con gestos, hombre. Dale.</div>
<div class="MsoNormal">
- Verás, no sé por qué, será la vejez, de un tiempo a esta
parte ando repasando mi vida, o nuestras vidas.De como hemos llegado hasta
aquí, y si realmente fue esto lo que quisimos. Creo que, de alguna manera, me
ando juzgando.</div>
<div class="MsoNormal">
- Extiéndete más ¿Es arrepentimiento? No te sigo.</div>
<div class="MsoNormal">
- No. No es eso; además, sería tarde ya. Pero siento la
molesta sensación de la duda. Duda de la que, siendo sincero, tengo la
respuesta. Intenta recordarnos hace cincuenta años, en Sierra Madre ¿Es esto lo
que tú y yo soñamos? No; es más, sospecho que en este momento, si fuésemos jóvenes,
lucharíamos contra un régimen como este, Fidel, contra nosotros mismos.
Representamos aquello contra lo que un día combatimos.</div>
<div class="MsoNormal">
-¿Estas chocheando, viejo? No, Ernesto, no.Haz memoria. Nosotros
peleamos contra una dictadura corrupta; esto es diferente. Esto es Marxismo,
amigo.</div>
<div class="MsoNormal">
- Llámalo como quieras ¿Qué más da? Mira el resultado, lo
demás son nombres, teorías, y cuentos. Poca diferencia hay del “patria o
muerte” al “viva la patria”. Arengas para pueblos descontentos.</div>
<div class="MsoNormal">
- Entonces ¿crees que todo esto ha sido en vano? ¿Todo este
tiempo? ¿Tanto esfuerzo no ha servido para nada?</div>
<div class="MsoNormal">
- Si. Ha servido para borrar ilusiones, para desandar lo
andado. Para eso ha servido, amigo mío. Si al menos hubiese muerto…</div>
<div class="MsoNormal">
- ¿Cómo dices?</div>
<div class="MsoNormal">
- Me llamarás paranoico, pero sospecho que <st1:personname productid="la CIA" w:st="on">la CIA</st1:personname> me dejo escapar
premeditadamente de Bolivia. Jugo muy bien sus cartas. No querían un mártir. De
haber muerto en sus manos, aún joven, en la plenitud de mi idealismo y cuando
medio mundo nos tomaba de referencia, una cosa sí se habría salvado,
dignificado, inmortalizado… ¡La revolución!</div>
<div class="MsoNormal">
- Es duro esto que dices. Siempre fuiste exigente y reflexivo,
con lo cual autocrítico. Algo hay de
razón en lo que piensas, pero…</div>
<div class="MsoNormal">
- …pero nada, Fidel. Mira, Cristo murió joven, hace más de dos
mil años, y en cambio, su ejemplo, o su lucha, sigue tan vigente hoy día como
entonces, aunque algunos se aprovechen de ello. ¿Qué crees que significará la
revolución cubana dentro de, ya no dos mil, sino doscientos años? Nada. Ni la
sombra de un recuerdo.Un nombre en el papel, una fecha, y poco más. El enésimo
fracaso de un sueño.</div>
<div class="MsoNormal">
Pero si hubiese muerto en aquel momento, en “mi momento”, sería
recordado como el “che”, y no como
Ernesto Guevara. Sería eterno.</div>
<div class="MsoNormal">
- No me seas vanidoso.</div>
<div class="MsoNormal">
- No es vanidad, Fidel…es que fui un ejemplo y me convertí en realidad. Gris y decadente realidad. No era yo, sino lo
que yo representaba. Debí morir de pie,
no encorvado. La revolución era el sueño. El sueño despertado. Ganó la
realidad.</div>
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cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-4811548637650166463.post-62779336845671601402012-12-30T12:32:00.003+01:002012-12-30T12:33:03.753+01:00El ruido de los corderos<br />
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Se acerca esa noche en la cual el hombre rinde pleitesía al
mayor enemigo de su libertad, y que paradójicamente él mismo creó. El reloj.</div>
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La imagen recordará, inevitablemente,
a las multitudes Hitlerianas que enfervorizadas esperaban las palabras del
führer, no muchos años atrás.</div>
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Esta vez los uniformes son distintos. Será el disfraz de lo
alegre el que se imponga, y las filas de gente han de ser aparentemente anárquicas.
Risa forzada, alcohol y voces. Desorden ordenado por los medios, por el sistema
y por ese consumismo programado y desmedido de la fecha obligada. La insolente
felicidad desatada por el bienestar ficticio
de unos muchos contrastará drásticamente con la humillante precariedad de los
menos.</div>
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A media noche, todos mirarán obnubilados a ese gran hermano
con agujas, esperando unos metálicos sonidos que den comienzo a los doce
segundos más fascistas del año, en el que todos, sin rechistar y complacidos,
harán lo mismo. Comer uvas, en ordinario y patético símbolo de sumisión.</div>
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Al finalizar, gritos de júbilo histérico y fingido
pronunciaran, al unísono, la gran mentira; ¡Año nuevo, vida nueva!</div>
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No obstante, feliz año nuevo.</div>
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cuantocuento,castelohttp://www.blogger.com/profile/11502040176572614803noreply@blogger.com14